viernes, 11 de septiembre de 2020

EL CRIMEN DE LOS GALINDOS. TODA LA VERDAD de Juan Mateo Fernández de Córdova

En mi niñez hubo dos hechos terribles que me marcaron muchísimo por motivos muy diferentes pero, sobre todo, porque en su momento, sin acabar de entender bien qué había pasado, escuchaba a mis padres y a mi familia hablar de ellos. Y notaba la tensión, la precoupación, hasta ese poquito de miedo que dan ciertos hechos. Uno fue la espantosa tragedia del camping de Los Alfaques, en el verano de 1978. Nosotros solíamos pasar buena parte del verano en un camping cercano a Punta Umbría, en Huelva, y recuerdo que, cuando aquello pasó, el estupor y el miedo se alojaron también entre las tiendas de campaña. Las radios no dejaban de dar noticias de aquel horror y la única tele del camping, en la cafetería-comedor, era punto de reunión de decenas de veraneantes a las horas de las noticias. El otro fue el que, en el libro que hoy os traigo, se trata de dar solución y respuestas: el crimen del cortijo de Los Galindos, en la provincia de Sevilla. Aún era más pequeña cuando sucedió y, en su día, lo que me aterraban eran las fotografías, en blanco y negro, de los periódicos con los regueros de sangre en el suelo y las paredes. Solo años después tuve conocimiento completo de lo sucedido allí y, a fecha de hoy, me sigue pareciendo un caso atroz, de los que provocan escalofríos a pesar del tiempo transcurrido.

Es El crimen de Los Galindos. Toda la verdad un libro escrito por el hijo de los que fueron dueños del cortijo y sus grandes fincas anejas, los ya fallecidos marqueses de Grañina. Con quince años, vivió casi en primera persona lo sucedido. Conocía a los asesinados, conocía el cortijo. Las muchas mentiras que se gritaron a los cuatro vientos, los bulos, los extraños giros en la investigación y el dolor por no encontrar al culpable o los culpables de las muertes le han supuesto toda su vida una herida sin cerrar. El caso prescribió en 1995 sin que nadie hubiese sido condenado. Pero en una conversación, muchos años después, del autor con su madre, algo que ella dijo le colocó en la cabeza todas las piezas. Lo que contiene este libro es una posible conclusión , el descubrimiento de todo lo que pasó aquella tarde de julio.

HAY SANGRE POR TODAS PARTES

22 de julio de 1975. Cortijo de Los Galindos, Paradas, Sevilla. El calor es demencial, aquellos días se superaron con mucho los 45 grados. Terminada la labor de limpieza de los olivos en Cerro Gordo, los jornaleros regresan en lo que parece el final normal de un día más de labor. Pero a medida que se acercan al caserío del cortijo observan una gran nube de humo que sale del pajar del cobertizo. Alarmados, echan a correr para ayudar pensando que el encargado, Manuel Zapata, y los dos tractoristas, Ramón Parrilla y José González, ya estarían haciendo lo posible por extinguirlo. Pero el cortijo les recibe desierto. No hay nadie a la vista y el incendio crece. Uno de los jornaleros corre a la vivienda del encargado y regresa aterrado gritando que no encuentra a nadie y que hay sangre por todas partes. Al conseguir sofocar el fuego se descubre el cadáver calcinado de José González y, muy cerca de él, el de su mujer Asunción.

Cuando la Guardia Civil llega, encuentran un gran reguero de sangre que cuza desde la sala de máquinas a la vivienda de Zapata y, de ahí, a la entrada de la finca. En la puerta del encargado, mucha sangre y, en las paredes de entrada de la casa, huellas de manos ensangrentadas. Un  escenario de pesadilla que no ha hecho nada más que empezar. La puerta de la vivienda está cerrada con un candado y la Guardia Civil lo hace saltar de un disparo. De dentro sale corriendo y aullando la perrita de Zapata y, ya en el interior, es espectáculo es de puro terror: un charco descomunal de sangre en el salón y un ancho "brochazo" que parte de él, recorre el pasillo y se pierde bajo la puerta del dormitorio, también cerrada con llave. Dentro, el cadáver de la esposa de Zapata, Juanita, con el cráneo destrozado. Todo el mundo comienza a buscar a Zapata, pero a quien encuentran muerto a tiros es al otro tractorista, Ramón Parrilla, en una cuneta de la finca y tapado con paja. 

Zapata no aparece. Las sospechas se centran en él y se elabora la teoría de que haya podido matar a su mujer y, después, acabar con José, Asunción y Ramón por haber sido testigos. Todo salta por los aires cuando, tres días después, aparece el cadaver de Manuel Zapata: boca abajo, cubierto por una lona y una gran cantidad de paja. La zona ya había sido revisada a conciencia los días anteriores y, para colmo, el forense determina que Zapata fue el primero en morir.

¿Qué había ocurrido en Los Galindos? ¿Por qué tanta saña y horror?


A día de hoy, con el caso prescrito y las investigaciones cerradas, el caso de Los Galindos sigue siendo uno de los crímenes más oscuros de nuestro país. Hubo muchas teorías, muchas posibles soluciones, pero jamás se ha llegado a ninguna detención ni a ningún culpable. La desastrosa investigación, con destrucción de pruebas que hubiesen sido vitales, la "limpieza" parcial por parte de los agentes de cara a las fotografías de los periodistas, los bulos, las noticias falsas, la invasión del cortijo por parte de vecinos y prensa impidieron que se encontrasen huellas o restos fundamentales para haber conseguido dar paz a los muertos y a sus familias.

Paradas sigue siendo un pueblo marcado por la tragedia. Los asesinados eran muy conocidos allí y mantenían excelentes relaciones entre ellos, pero la prensa y las habladurías, en su afán por el morbo y la noticia fácil, fueron haciendo recaer la culpabilidad en uno u otro, conviertiendo a las víctimas en culpables. Y eso emponzoñó el ambiente y las amistades. Juan Mateo Fernández de Córdova intenta, con este libro, limpiar los nombres de los cinco fallecidos y acabar con los bulos.

El crimen de Los Galindos. Toda la verdad contiene una posible respuesta, muy plausible, a todas las preguntas y ata todos los cabos sueltos que existen aún en este caso. Obviamente no es una resolución oficial del caso que, como os decía antes, lleva años prescrito, pero sí que aporta luz a muchos rincones oscuros. Una creíble contestación a tantos interrogantes. No debemos perder de vista que es una versión extraoficial pero, desde luego, cierra muy bien el círculo

Juan Mateo Fernández de Córdova aprovecha también las páginas del libro para hablar de la Andalucía de la época, de las cooperativas, del funcionamiento del cortijo, de sus padres, de la herencia familiar . Hay un capítulo que merece especial atención: las andanzas de su padre, el marqués, y su secretario la tarde de los crímenes. En una España que se enfrentaba al final de la dictadura y en la que el mundo rural seguía siendo un ámbito muy cerrado, Los Galindos se erigió como el foco de la maldad.

Si tengo que ponerle un "pero" a este libro es que, en mi opinión, necesita una corrección más completa. Hay algunas erratas muy claras y el mal uso de las comas y los signos de puntuación por parte del autor, en muchos casos, dificulta la lectura de ciertos párrafos. En ocasiones la narración se embarulla y, aunque es fácil retomarla, no vendría mal un repaso más exhaustivo.

A pesar de ello, puedo aseguraros que El crimen de Los Galindos. Toda la verdad me ha supuesto una lectura muy interesante. Me siguen dando escalofríos la narración, incluso la más objetiva, de lo ocurrido allí y esas fotos en blanco y negro del lugar. En el libro no están las más escabrosas, pero es como si en las paredes del cortijo, que sigue teniendo actividad, se hubiese quedado impregnada la muerte. Ya será siempre un lugar tenebroso y "maldito" a pesar de la brillante luz del sol andaluz. Os la recomiendo, es una muy buena crónica de una época y de muchos silencios.

Muchas gracias a la Editorial Almuzara por el ejemplar.


10 comentarios:

  1. Pufffff yo de esto no me acordaba. Es gorrito que no se resolviera. El libro tiene que ser súper interesante.👍👍

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  2. Tiene una punta fabuloso Yolanda, me lo llevo bien apuntado.
    Besos

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  3. En efecto, este es uno de los casos más espeluznantes de la crónica negra de España. Ya tenía ganas de leer este libro, pero ahora con tu reseña, mucho más. Gracias.

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  4. Ay compañera, lo que me has traído hoy. A mí que me encantan todos los hechos truculentos y con gran misterio. He visto pelis y documentales de este caso pero no he leído nada. Me dejas con la miel en los labios. Indagaré. Lo del camping me dejó tan marcada como a ti, hasta el punto de que, cuando voy por la carretera y se me coloca un camión cisterna delante me pongo nerviosa, incluso aunque transporte leche... Aquello fue tremendo. Tomo nota de este libro, a pesar de las erratas. Besos

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  5. Un gustazo siempre leer tus reseñas!! Un beso enorme

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  6. Hola.
    Este libro lo voy a dejar pasar, no me llama mucho y además no es un genero que suela leer. Gracias por la reseña.
    Nos leemos.

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  7. Pues no te voy a decir que me has dejado con muchas ganas de leerlo así que a la larga lista va de cabeza. Reseñaza.
    Besos

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  8. Aunque no recordaba exactamente lo que pasó, si su existencia. Una pena lo de las erratas, a veces te sacan de la lectura. Besos.

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  9. Hola, yo leí hace muchos años Los invitados de Alfonso Grosso que trataba el tema de Los Galindos, recuerdo que me gustó bastante, ahora no se si me animaría a retomar el tema, tendré en cuenta el libro no obstante. Besinos.

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  10. La Guardia Civil debería esclarecer definidamente este caso con los datos que ya dispone, y señalar a los verdaderos responsables que son el dueño y el administrador del cortijo. No pueden ser otros. Todo apunta a ellos.

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