NO DECEPCIONES A TU PADRE de Carme Chaparro

Recuerdo perfectamente lo que pensé cuando a Carme Chaparro le concedieron el Premio Primavera de Novela por No soy un monstruo: que ya estábamos otra vez con los premios a la carta concedidos a caras conocidas por aquello del tirón de ventas. Me la envainé, como dice mi admirado Reverte, cuando leí la novela. Me pareció original, planteaba dilemas morales oscuros y tenía un buen desarrollo, así que la disfruté y me gustó. Apenas un año después, Carme lanzó La química del odio, manteniendo casi todos los personajes principales de la anterior y con una Ana Arén arrastrando muchas goteras en el alma por lo sucedido. Aquí tengo que discrepar con mi querido Pedro, de El buho entre libros, que considera esta novela mejor que la anterior: con todo mi respeto y siendo esta solo mi opinión, no me lo pareció. Primero porque creí que era una publicación muy precipitada, aún había ecos muy potentes del libro anterior. Había partes en la trama un poco cogidas con pinzas y, aunque el conjunto ofrecía un thriller atrayente y que se leía de maravilla, no me pareció tan redonda como No soy un monstruo. No quiere decir esto que no me gustase, los personajes estaban bien perfilados y el planteamiento era muy original pero noté un regusto de prisa, de publicar en una fecha concreta. Por eso esperaba con mucha curiosidad una tercera novela de Carme y han merecido la pena estos tres años de paréntesis escritor por su parte.

Y llegó No decepciones a tu padre y he de decir que sí, que de nuevo he tenido la sensación de la primera novela de Carme, la del arranque potente y un argumento que sabe mantenerte en vilo hasta el final. Con varias historias entrelazadas que cualquiera de ellas te pone la piel de gallina y sabiendo mostrar temas que son una auténtica llaga para nuestra sociedad. No es fácil hablar de trata de mujeres, del suicidio, de páginas pornográficas que esconden infiernos, de infancias rotas que crean adultos llenos de agujeros. Pero vamos por partes.

ACOSTUMBRARSE AL DOLOR

Cuando se es joven, bella, famosa y rica, morir como muere Nina Vidal es casi inconcebible. Asesinada con una crueldad desmedida y de un modo que hace siglos que no se veía. Pocos días después, el cadáver de otra chica aparece en medio de la vía del tren: otra joven rica y famosa, amiga de Nina Vidal, junto a la que se había criado en un ambiente profundamente elitista. Su asesinato también resulta aterrador por el modo en que se ha llevado a cabo. Ana Arén, inspectora jefe de la Policía Nacional, se hace cargo de ambos casos y, junto a su equipo, descubren que ambas muertes se han producido copiando torturas terribles de siglos atrás. ¿Están ante un asesino en serie? ¿Habrá más víctimas? ¿Qué ha podido empujar al asesino a semejantes atrocidades? Cada paso que la inspectora Ana Arén da en pos de encontrar la verdad la va enredando en una madeja intrincada y compleja, con muchos hilos de los que tirar. Y puede que alguno de ellos esté atado a su propia vida.

Como os decía antes, No decepciones a tu padre tiene un arranque poderoso, de los que consiguen descolocarte pero te mantienen dentro del libro bien sujeta. He de decir, en primer lugar, que la manera de narrar de Carme Chaparro ha dado un salto adelante. Con esto no quiero decir que sus novelas anteriores no estuviesen bien escritas: ella tiene bagaje suficiente por su profesión para escribir con corrección y con intención. Pero he notado más brillo, mejor hilazón entre todas las tramas, más profundidad en los personajes y eso, como lectora, siempre es de agradecer. Me han gustado especialmente los diálogos, que fluyen con naturalidad, sin impostación. Son diálogos de personas reales en situaciones reales y eso le otorga un plus.

También es de agradecer que no se recree en la descripción de detalles truculentos. Le bastan tres o cuatro pinceladas para crear el ambiente propicio para que el lector llene los huecos e imagine lo demás, un ejercicio realmente apasionante cuando estás metida hasta las trancas en una historia que se retuerce en cada capítulo. Ana Arén, en esta novela, se enseñorea por completo de las páginas. Si bien en No soy un monstruo quedaba, quizá, eclipsada por la alargada sombra de Inés Grau, aquí toma las riendas con fuerza. Y aunque Inés Grau vuelve a aparecer en su vida (estupenda e inesperada sorpresa que aporta un contundente giro de guión) sabe clavar los talones para que no la arrastre la marea.

No decepciones a tu padre es una novela de culpa, de venganza, de maldad, en la que no le duelen prendas a Carme para sumergirnos en mundos tan sórdidos como la trata de mujeres en su peor versión, el sadismo, el dolor capaz de destruirnos desde dentro. En cómo las chicas captadas por las redes de prostitución llegan a convertirse en "pedazos de carne con agujeros", destruidas como seres humanos, con el cuerpo y el alma destrozados. Pero también es una novela de infancias perdidas. Cuando el refugio que nos supone la infancia salta por los aires, nos convierte en adultos perdidos, sin referentes o con referentes equivocados, con cicatrices que no se ven pero que siguen sin curar por dentro. Porque la familia, queramos o no, nos modela y nos marca y nunca podemos escapar del todo.

Siendo mi crítica completamente favorable, sí que ha habido un par de cosas que me han convencido menos. Por supuesto no voy a desvelar nada importante, pero hay algo en la autopsia de la primera víctima que habría debido verse por fuerza y se soslaya por completo, salvando así una de las "sorpresas" de cara al final. Tampoco, y lo siento enormemente por todas mis amigas del Club de Lectura LL que son muy fans de ella, me creo la historia de amor entre dos de los protagonistas. Tuve la sensación de que estaba un poco metida con calzador, a veces, incluso, me ponía de mal humor, pero ya me conocéis: ¿para qué quiero Pretty Woman si existe Depredador? 

Quizá haya sido cosa mía y de mi memoria, que guarda datos y me los trae de formas insospechadas, pero en algún momento he recordado el caso aquel de famosas que se vieron involucradas en una red de vídeos porno de un conocido director de ese mundillo pseudocinematográfico (por llamarlo de alguna manera). Y hay una referencia al Nani, pero no al original. Me hubiera gustado haber tenido tiempo en nuestro encuentro vía Zoom para preguntarle a Carme por todo esto.

Creo que No decepciones a tu padre es una estupenda "novela de crímenes", un thriller policial que te va llevando a una espiral que gira cada vez más rápido y en la que todo acaba cuadrando, a veces de forma muy dolorosa. Me ha gustado estar ahí. Os invito a que os lancéis de cabeza.