Hace unas semanas recibí un correo en el mail de este blog en el que José Luis Fernández Juan se ponía en contacto conmigo para presentarme su libro Pinceladas de Harmonía. Me ofreció conocerlo y se puso a mi disposición para traerlo a todos vosotros, cosa que hago encantada por la confianza que me otorgó como por la originalidad de su libro.
José Luis Fernández Juan es valenciano y de siempre ha manifestado una gran curiosidad por el arte. Ha participado en diferentes proyectos de cine, teatro y publicidad. El libro que hoy os presento, Pinceladas de Harmonía, autoeditado, vio la luz por primera vez en 2014 y, desde entonces, ha encadenado cuatro ediciones con la editorial Círculo Rojo. Actualmente acaba de publicar su segundo libro, El Diccionario de JLFJ en el que, como en el anterior, juega con el idioma, las metáforas y los diferentes estilos literarios. José Luis es profesor de Lengua y Literatura Castellana para alumnos de ESO y Bachillerato en el Colegio de Nuestra Señora del Pilar en Valencia.
Pinceladas de Harmonía intenta llevar a la literatura conceptos tan diferentes como la psicodelia, el conceptismo y hasta el culteranismo y lo hace a través de 17 peculiares relatos. Muy cerca de las vanguardias literarias, tan en boga a principios del siglo XX en Europa, hay mucho en esos relatos de surrealismo pero también de un benéfico buen humor que no es el habitual, sino más inteligente, más para hacer pensar, para sonreir mientras lo asimilamos. El propio autor, en diferentes entrevistas, ha manifestado que esta obra bien puede servir para sus propios alumnos para potenciar el conocimiento de la lingüística y la semántica y cree que es un canto a lo sencillo y a lo fácil que puede resultar llevarse bien con los demás y con lo que nos ocurre.
Una vez leído el libro, José Luis me contestó a unas breves preguntas en las que nos aclara la intención que subyace bajo las páginas de su libro, sobre los motivos que le impulsaron a escribirlo. Y también contestó a preguntas más "incómodas" ya que, leyéndolo, me hizo preguntarme si realmente podía considerarse una lectura apropiada para los alumnos, debido a la complejidad del vocabulario y de las figuras retóricas que utiliza en él. Aquí os las dejo para que conozcáis mejor a José Luis Fernández Juan y sus Pinceladas de Harmonía.
JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ JUAN Y SUS PINCELADAS DE HARMONÍA
- ¿De dónde surge la idea de este libro?
¿Qué te llevó a escribirlo?
Surge por una necesidad vital de
experimentar con las palabras y con las ideas. Me seduce la idea de construir a
partir de los referentes literarios que han marcado mi vida. Experimentar la
fusión con el momento, con la estética, con la emoción, con las imágenes y con
la pasión me pareció una motivación suficientemente atractiva como para
embarcarme en la creación de una obra literaria.
Pinceladas
de Harmonía es un cielo, cada episodio es un viento
y cada palabra, una nube. Yo estoy contiguo a esta realidad. Les doy libertad
de acción, los observo y me dejo llevar.
El acto de escribir me posibilita llegar
a una nueva realidad más enérgica y valerosa. Para mí, escribir es la rebeldía
de la exaltación de lo inédito.
- ¿Cuáles son tus influencias a la hora
de escribir? ¿Qué autor que te ha marcado especialmente?
Preferentemente los autores del Siglo de
Oro y los de la primera mitad del siglo XX. En estos dos períodos literarios
podemos encontrar la esencia de nuestros valores literarios.
Me gusta implementar figuras literarias
en la prosa para consustanciar el idealismo con el realismo y poder así meditar
con más enjundia sobre los avatares de nuestra existencia. Esto se lo debo
fundamentalmente a Cervantes.
Por otro lado, el placer por la
experimentación riesgosa me viene de movimientos literarios como el Modernismo
o el Surrealismo. En Pinceladas la
huella de Darío o Lorca es más que evidente. El anhelo de naturalizar el mundo,
el ir más allá, la liberalización total o la pretensión de provocar acciones
son rasgos que aparecen en cada página.
La influencia de estos movimientos y
autores ha moldeado definitivamente el estilo literario de Pinceladas de Harmonía y ha traspasado los lindes de su invención.
- En alguna entrevista te he leído que
este libro es un “recurso didáctico” para alumnos de la ESO y Bachillerato,
pero ¿crees que son relatos comprensibles para ellos, dado el lenguaje que usas
en ellos? ¿Aciertan a entender por completo su esencia?
En Pinceladas
de Harmonía podemos hallar los rasgos arquetípicos del Conceptismo,
Culteranismo, Modernismo y Surrealismo. Estos movimientos son los más
enrevesados (y más seductores) de nuestra literatura. La dificultad de sus
dispositivos retóricos genera la necesidad de tener que acompañar muy de cerca
a los alumnos para que estos puedan asimilarlos con tino.
La Fábula
de Polifemo y Galatea de Góngora o algunos Sonetos de Quevedo o Lorca no son recomendables (por su extrema
dificultad) para interpretar la inherencia de estos movimientos que se han de
estudiar porque están en los programas educativos de ESO y Bachillerato. Han de
seleccionarse con sagacidad otro tipo de textos para comentarlos; bien de estos
mismos autores, bien de otros. De lo contrario, podemos cometer el error de que
los alumnos lleguen a aborrecer estos períodos tan jugosos como complejos.
Una alternativa interesante para
absorber, descifrar y comprender estos contenidos sería elegir como opción de
lectura Pinceladas de Harmonía. Aquí
aparecen todos los sesgos de estas corrientes literarias, pero de una forma más
afable y complaciente. El contexto de la obra se desarrolla en esa sociedad
tecnológica y moderna en la que los alumnos se desenvuelven de forma cotidiana.
La identificación con el pueblo Harmonía es inmediata. Si además vehiculamos el
humor como motivo permanente de seducción, la simpatía hacia la lectura de la
obra queda garantizada.
Descifrar los significados patentes y
latentes de las frases de Pinceladas
se convierte en un solaz motivante y cautivador. Conseguir que el alumno
aprenda jugando es el reto que me marco. Leer Pinceladas de Harmonía equivaldría a mirar de forma caleidoscópica
una realidad con idioma propio.
- ¿Qué opinas de las lecturas
obligatorias en esas edades? Siendo profesor de lengua y literatura ¿cuáles son
las que tú recomendarías?
Las lecturas obligatorias (aunque no me
agrada el adjetivo calificativo) se convierten en una necesidad perentoria para
que el alumno mejore su vocabulario, su velocidad lectora, su comprensión, su
creatividad y su imaginación. Además con la lectura de estos libros
seleccionados potenciará su capacidad reflexiva y crítica, así como su
autoestima, seguridad y determinación.
Conocer obras como La Celestina, La vida es
sueño, El lazarillo de Tormes, Don
Juan Tenorio, Tres sombreros de copa o la Antología poética de Machado o de la Generación del 27 son algunas obras
que yo recomiendo en mi colegio y que considero imprescindibles para la
formación intelectual de nuestros discentes. Estas lecturas lejos de ser
aburridas, son un arma de construcción masiva para vencer a los juegos
antipedagógicos que las nuevas tecnologías han traído para estrechar el buen
juicio y entendimiento de nuestros alumnos. Tendrían que inventarse juegos
digitales en donde la lectura total o parcial de estos clásicos “enganchase” al
alumnado y les expandiera la mente. Invertir en leer (no importa si en digital
o en papel) mejora la empatía, alivia el estrés y favorece la concentración. La
lectura de un libro es un beneficioso viaje artístico y vital al que ningún
alumno tiene que renunciar; sea obligada o de libre elección.
- En tu trabajo ¿qué dificultades sueles
encontrar a la hora de impartir tus asignaturas? ¿Cómo consigues mantener el
interés de tus alumnos en unas edades en las que suelen “dispersarse” con
facilidad?
La mayoría de los adolescentes estudia
por inercia. Sus centros de atención poco tienen que ver con estudiar las
asignaturas que impartimos. Nosotros intentamos revertir esta realidad.
Para que los alumnos estén “centrados”
considero fundamental que en las primeras clases todos tengamos diáfano cuáles
son nuestros roles en el aula. Hay rutinas y procedimientos fijos que se han de
asimilar y mantener a lo largo del curso. Intento ser más maestro que profesor.
Más que aprendan los temas de una materia (que también), me interesa que se
formen como personas. En cuanto puedo relaciono cualquier contenido con el
espacio-tiempo de los chavales para que ejerciten la reflexión. Las clases
suelen ser activas; interactuamos permanentemente con actividades pragmáticas
en donde empleamos recursos digitales y trabajos cooperativos. Ellos siempre
son los auténticos protagonistas; forman parte de los contenidos transferidos.
Fomentar el sentido de pertenencia
resulta clave en este tipo de educación inclusiva y emocional que defiendo y
que, por supuesto, aparece en Harmonía.
Por otro lado, piensa que yo sigo
aprendiendo con la literatura; es apasionante. Esa pasión se la intento
transmitir a los alumnos para que vean en la asignatura una razón de ser.
- Leyendo el libro aprecio un uso del
lenguaje realmente rico, a veces rozando lo barroco. También abundantes
metáforas e, incluso, párrafos que pueden rozar el surrealismo de las
vanguardias ¿Actualmente crees que este tipo de literatura es accesible, en este
tiempo de mensajes de whatsapp y vocabulario cada vez más escaso?
Constatas lo que te he comentado antes.
Intento proponer un estilo diferente como alternativa a la realidad digital que
ha generado la adicción a las TIC. Las habilidades verbales se han depauperado
con la comunicación cibernética.
La “escritura” de mensajes por móvil con
faltas de ortografía, frases sesgadas, carencia de signos gráficos o
abreviaturas se ha convertido en una infausta realidad. La involución
comunicativa lleva a una regresión cultural altamente preocupante.
El estilo de Pinceladas sería una apuesta “alternativa” por la comunicación
culta y placentera; Una apuesta entre los mensajes cincelados y polisémicos
frente a los mensajes inmediatos carentes de profundidad. Tú eliges.
La literatura “trabajada” de Pinceladas de Harmonía es atractiva
porque se interpreta como un juego de búsqueda, acertijo y placidez, y… ¿a
quién no le gusta jugar?
La moda de la TICdependencia pasará; Pinceladas de Harmonía siempre te estará
esperando.
- Son 17 relatos en los que impera el
positivismo en un mundo idílico, en los que hay un esfuerzo por el triunfo del
buen humor ¿Crees que la literatura actual adolece de ese buen humor?
El humor en la literatura siempre ha
existido: Cervantes, De la Serna, Tomeo, Quevedo, Macías, Valle-Inclán… Pinceladas continúa con la tradición.
Con el humor aprendemos a comprender
mejor el mundo; y si este mundo está en crisis, mejor que mejor. Aporta la
delicadeza del saber con la mirada del percibir.
Pinceladas es una obra divertida que garantiza el
entretenimiento. El humor tiene valor literario. Si nuestra sociedad es
absurda, el humor es sensato. Garantiza la lógica y rigor que falta para poder
entender mejor las relaciones entre los humanos. El humor siempre ha volado por
la literatura. En Pinceladas se posa
y descansa en una propuesta absolutamente intransferible.
- ¿Qué es lo mejor que te han dicho
sobre tu libro?
Que es diferente. Esta frase es lo más a
lo que puede aspirar un autor.
- He leído algunas reseñas publicadas
sobre Pinceladas de Harmonía ¿Hasta
qué punto crees que han acertado con el contenido de tu libro? ¿Te sientes
comprendido?
Las reseñas que he leído hasta ahora han
sido muy positivas; estoy muy contento. La crítica literaria ha emergido con el
avance de las nuevas tecnologías y muchas revistas literarias y medios de
comunicación se han hecho eco de la publicación de obras literarias.
Yo, como autor, agradezco cualquier
opinión que ayude a difundir el valor de un libro. Cuantas más opiniones se
den, más se conocerá una obra y más lectores podrás ganar.
Particularmente no me marco como reto
que Pinceladas obtenga una difusión
inmediata y masiva. Prefiero que se vaya descubriendo y saboreando poco a poco.
De momento vamos por la cuarta edición. Con el tiempo espero tener más. Como te
he comentado antes, Pinceladas es un
libro siempre te estará esperando.
- ¿Estás trabajando en algún otro
proyecto actualmente? ¿Puedes adelantar algo?
Acaba de salir mi segunda obra: El diccionario de JLFJ; un repertorio de
palabras con significados distorsionados y exprimidos. Te avanzo algunos:
Abundespués: Copioso en el futuro tanto
como en el pasado.
Caramar: Cefalópodo comestible con
rostro de ponto.
Diatribu: Discurso ultrajante realizado
por un grupo uniforme con tierra propia.
Grabitación: Atracción mutua que
sobreviene en un cuarto.
Jorlnada: Día sin niños.
Numeroso: 8245913706073195428.
Procastinar: Postergar el proceso de
selección para elegir al elenco del espectáculo.
Santurrón: Dulce gazmoño navideño.
Trenquete: Frontón cerrado por vagones
móviles engarzados.
Vencemento: Plazo que la arcilla y demás
materiales calcáreos disponen para una vez cocidos y molidos se puedan mezclar
con el agua y consigan convertirse en una masa compacta, sólida y dura.
Web del autor:
Ahora mismo no creo que lo lea, pero gracias por la entrevista al autor y por acercarnos su obra.
ResponderEliminarBesos
La entrevista es muy interesante pero el libro no me llama la atención la verdad.
ResponderEliminarUn beso
La verdad es que la portada es muy llamativa, pero el libro no lo veo para mí. Una entrevista, en cualquier caso, le da un poco de visibilidad al autor.
ResponderEliminarBesos